Las Lágrimas de María
Las lágrimas de María se dan en las apariciones con las que María acompaña a la Iglesia en su camino por el mundo
Vemos a María llorando en las apariciones donde nos muestra que camina con la Iglesia, por todo el mundo. María llora en La Salette, a mediados del siglo pasado, antes de las apariciones de Lourdes, en un momento en que la cristiandad en Francia se enfrentaba a una creciente hostilidad.
Ella llora de nuevo, en Siracusa, al final de la Segunda Guerra Mundial. Es posible comprender estas lágrimas en el contexto de aquellos trágicos acontecimientos provocados por el conflicto, el exterminio de los hijos e hijas de Israel y la amenaza a Europa del Este por parte del comunismo abiertamente ateo.
Las lágrimas de María son signos: dan testimonio de la presencia de la Madre en la Iglesia y en el mundo. Una madre llora cuando ve a sus hijos amenazados por el mal, ya sea este espiritual o físico.
Vivamos la cuaresma en profundidad junto a La Virgen Maria, “consolemos a Los dos Corazones” y reparemos tantos dolores y ofensas que como humanidad les hemos causado a Jesús y Maria
Recordemos lo que dijo La Virgen en Medjugorje: “Con la oración y ayuno, hasta las guerras pueden ser detenidas” hagamos ayuno los miércoles y viernes como nos pide la Virgen.
Fuente: Rosario de Mar a Mar